Que bien me lo pasé el pasado fín de semana en el Festival de Sitges. El sábado 6, después de comer me fuí con mi amigo Lost Boy en dirección a esa población. Con música metalera de fondo íbamos comentando las ganas que teníamos de ver (con eso nos conformábamos) a uno de nuestros ídolos del género de terror, y si se quiere del subgénero zombie en concreto. Pero para eso quedaban unas cuantas horas. Al llegar nos dirijimos a "El Retiro", uno de los cines, para ver la hongkonesa
'Invisible Target'. Un gran divertimento de acción y tortas (y muchas artes marciales) de 2 horas, donde no queda en pié ningún(o casi) edificio.
Al terminar, y para hacer tiempo nos fuímos a la zona del Brigadoon e intentar ver la exposición sobre los 40 años del festival. En el dicho Brigadoon no pasaban ninguna peli ni nada, y la exposición estaba cerrada, con lo que nos quedamos algo decepcionados. En este sentido creo que el festival va a menos, porque las exposiciones (la pude ver el domingo) cada año son más sosas. Lo más interesante ha sido (como otras veces) una figura hecha de arena. La de este año era un Sant Jordi y el dragón.
Al rato nos dirigimos al "Auditiori", y tras comer un bocadillo, nos pusimos a esperar en la cola hasta que llegase el gran momento. Ver en persona a George A. Romero y su última película,
'Diary of the Dead'. La emoción me embargaba, y aunque nos sentamos algo ladeados respecto a la pantalla, estábamos justo enfrente de Romero.
El director subió al escenario del Auditori a recoger el Gran Premio Honorífico. Si el festival cumplía los 40 años, a
'Night of the Living Dead',su primer film, le faltaba un año para lo mismo. Él puso de moda el subgénero zombie, y 40 años después vuelve a estar de moda. Dicho premio lo dedicó al cine independiente, fuera del gran Hollywood.
Tengo un gran pero, que los fans no pudiésemos hacer fotos de nuestro ídolo como recuerdo. Aunque ya véis que al final me las apañé. Este es otro motivo por lo que creo que el festival va a menos. Su director, a la hora de dar el premio a Romero, dijo que lo hacía más como fan. Por eso no entiendo esa prohibición de hacer fotos. Él más que nadie debería entenderlo.
El domingo 7 cogí el tren y me fuí solo a Sitges. Mi primera peli la tenía bien temprano (las 10 de la mañana) con lo que me tocó madrugar. Con la garganta chunga y algo resfriado, sufrí los más que habituales problemas de Renfe. Llegando con el tiempo algo justo fuí a "El Retiro", donde pude ver
'Triangle', película de acción y humor, co-dirigida por Johnnie To, Tsui Hark y Ringo Lam.
Después de comer asistí a la proyección de la única película de animación que he visto este año. Se trata de
'Tales from Earthsea', basada en la novela de Ursula K. Le Guin. El director es Goro Miyazaki, hijo del mítico Hayao (
'Porco rosso',
'Pricess Mononoke'). Tal vez este hecho hizo que esperase algo más. Porque aunque visualmente se puede decir que es un Miyazaki, le queda mucho para ser la mitad que su padre.
Tras esta pequeña decepción, que mejor para arreglarlo que una comedia policiaca. Y si es de los mismos que
'Shaun of the Dead', mejor todavía. Se trata de
'Hot Fuzz', titulada aquí por
'Arma Fatal'. Menudos títulos que ponen aquí.
Y precisamente de eso habló su director, Edgar Wrigth. Resulta que aquí en españa, su anterior película
'Shaun of the Dead' se le cambió por
'Zombie's Party'. Este título le hizo tanta gracia al director, que en
'Hot Fuzz' hace un guiño a dicha carátula.
Y con esto se acabó el primer fín de semana del festival de Sitges.
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